Ponte en mis zapatos es una pieza que busca visibilizar la situación de los migrantes africanos y de medio oriente que sobreviven; en primer lugar a la travesía para llegar a Europa y en segundo lugar a las políticas proteccionistas de los estados europeos para con los migrantes de estos lugares. La pieza se presenta como una metáfora de lo que llamo el "esclavismo contemporáneo" (1ero generación de la ilusión de la salvación en el continente europeo, 2do obstaculización jurídica y represiva para con los migrantes/generando políticas de la muerte, 3ero relegación del migrante a una vida ilegal, a la imposibilidad laboral, sin igualdad de derechos). La pieza muestra a un performer ("mantero"), des-identificado, con una cadena del cuello y un marcador en su extremo. En el suelo, una manta blanca con diferentes pares de calzados y varias preguntas asociadas a lo que implica vender calzados ilegales. La obra busca cuestionar al presente a partir de un cuerpo sin identidad/sin papeles/ilegal que vende un producto ilegal sobre una tela blanca/sobre un suelo europeo. Así mismo la gente comienza a contestar las preguntas con el marcador negro en el cuerpo del performer generando la oscuridad/la negritud, consumido por los cuerpos blancos en suelo blanco.