La pieza intenta cuestionar los modos de producción de conocimiento que se vienen generando en la danza contemporánea. Partiendo de tres grandes eslabones: la didáctica con la cual se imparten las clases, que tipo de currícula oculta subyace debajo de los postulados que se intentan transmitir a los estudiantes y por otro lado la aplicación del concepto de interactividad en la escena. Estas tres cuestiones se cortan con un eje transversal que es el homenaje a David Zambrano en su 60 aniversario.